En 1928, el club, que se hallaba sin estadio fijo porque el que utilizaba desde su traslado a Avellaneda quedó destruido por un incendio, construyó un nuevo estadio sobre un terreno ubicado cerca de las vías del tren, que se hallaba largamente inutilizable por un pantano. Si el año pasado nos sorprendieron con el tono rojo brillante, aunque este se había usado ya, la tercera equipación del Real Madrid 2019-2020 se espera que sea en un tono verde menta.