“En el mundo del fútbol las cábalas existen y son muy fuertes, Boneco era un talismán de la suerte, y cuando nos falta sentimos su ausencia como la de uno de nosotros”. Avellaneda por su parte, es una de las pocas ciudades en el mundo que tiene a dos clubes campeones mundiales junto a Buenos Aires, Madrid, Milán, Montevideo, Porto Alegre y São Paulo. Si los lusos ganan y el Atlético también, tendrá que vencer al Oporto en el último duelo de la liguilla.