El logro fue de tal impacto que al año siguiente, el Torneo Río-São Paulo tuvo que incluir clubes del estado de Minas Gerais y Río Grande do Sul, creando el Torneo Roberto Gomes Pedrosa, el «Robertão» que fue el precursor del actual Campeonato Brasileño de Fútbol. Por el título de la Copa de Brasil 1966, se reconoció a Cruzeiro por ser el primer club mineiro en ganar un campeonato nacional, ya que en diciembre de 2010 la Confederación Brasileña de Fútbol aprobó el logro para el club como campeón del fútbol brasileño.