Por ahora el equipo amarillono ha causado peligro en la portería de Remiro. Esa diana y dejar la portería a cero por sexto partido consecutivo del Barça, una racha de 630 minutos sin recibir. No era una tarea fácil, se enfrentaban al Celta, que siempre consigue poner las cosas complicadas a los culés e incluso tuvieron opciones hasta el último instante.